Carpaccio de ternera

Cuando hablamos de Carpaccio nos referimos a finas lonchas de pescado o carne presentadas en crudo, con un poco de limón, aceite de oliva y queso grana padano por encima.

El más conocido es el carpaccio de ternera, normalmente se elabora con solomillo, previamente congelado para eliminar algunas bacterias que se encuentran en la carne cruda.

En ésta receta, cocinaremos ligeramente la carne de ternera, así tomará más y mejor sabor, a pesar de que éste no es el procedimiento tradicional.

Procedimiento

1. Eliminar la grasa visible de la carne, sazonar con sal y pimienta.
2. En una sartén con un poco de aceite de oliva caliente, añadiremos el solomillo de ternera y freiremos 1-2 minutos por cada lado hasta obtener una corteza dorada.
3. Otra opción, en lugar de freír, sería introducir el solomillo de ternera en el horno precalentado a 180ºC durante 20 minutos.
4. Dejar enfiar la carne durante 15-20 minutos.
5. Ahora enrollaremos la carne en papel film transparente y ataremos los extremos.
6. Introducir la carne envuelta dentro del congelador durante 25-40 minutos, así serás más fácil cortarla finamente.
7. Mientras tanto prepararemos los demás ingredientes, cortar el hinojo y reservar.
8. Exprimir un limón y bañar con él el hinojo, sazonar con sal kosher.
9. Sacar la ternera del congelador y cortar con un buen cuchillo largo y afilado, la carne en lonchas muy finas.
10. Mazar la carne con un mortero y sobre una tablilla de madera.
11. Colocar unas cuantas lonchas de ternera en un plato, encima de ésta añadir el hinojo y después el queso grana padano. 
12. Opcional: incorporar unas gotas de aceite de trufa (¡ojo!, no pasarse con ésto pues su sabor es muy intenso).

¡Listo!, ¿Qué te ha parecido éste carpaccio de ternera?, ¿lo has probado alguna vez?, déjanos un comentario y no olvides de compartir ésta receta con tus amigos a través de las redes sociales. 🙂